
Implantes dentales
Los implantes dentales son una solución moderna y duradera para reemplazar dientes perdidos o severamente dañados. Consisten en pequeños tornillos de titanio o zirconio que se colocan en el hueso maxilar o mandibular, actuando como raíces artificiales sobre las cuales se fijan coronas, puentes o prótesis dentales. Este procedimiento no solo devuelve la funcionalidad, sino también la estética y la confianza al sonreír.
¿Cómo funciona un implante dental?
- Colocación del implante: El tornillo se inserta quirúrgicamente en el hueso. Este proceso se realiza bajo anestesia local para garantizar la comodidad del paciente.
- Osteointegración: Durante un periodo de entre 3 y 6 meses, el implante se fusiona con el hueso, proporcionando una base sólida y estable.
- Colocación de la prótesis: Una vez que el implante está completamente integrado, se coloca una corona o prótesis personalizada que imita la apariencia y función de un diente natural.
Ventajas de los implantes dentales
- Durabilidad: Con los cuidados adecuados, los implantes pueden durar toda la vida.
- Estabilidad: Ofrecen una fijación segura, sin riesgo de movimientos como ocurre con prótesis removibles.
- Estética natural: Las prótesis se diseñan para integrarse perfectamente con el resto de tus dientes.
- Conservación ósea: Ayudan a prevenir la pérdida ósea que ocurre tras la extracción de un diente.
- Mejora en la calidad de vida: Permiten masticar, hablar y sonreír con confianza.